Guía para Calentar

Una bomba de calor es un dispositivo o sistema que mueve calor de un lugar a otro, generalmente con el fin de calentar o enfriar un espacio. Es un tipo de sistema de HVAC (calefacción, ventilación y aire acondicionado) que se puede utilizar tanto para aplicaciones de calefacción como de refrigeración. La principal función de una bomba de calor es transferir energía térmica desde una fuente (ya sea el aire, el suelo o el agua) a un destino (un edificio para calefacción o el exterior para refrigeración).

Los componentes clave de una bomba de calor incluyen:

Evaporador: Aquí es donde el refrigerante absorbe calor de la fuente (por ejemplo, aire, suelo o agua) y se convierte en gas.

Compresor: El compresor aumenta la presión y la temperatura del gas refrigerante, preparándolo para el proceso de intercambio de calor.

Condensador: En el modo calefacción, el condensador libera en el destino (espacio interior) el calor absorbido de la fuente. En el modo refrigeración, libera calor del espacio interior al exterior.

Válvula de expansión: Este dispositivo regula el flujo de refrigerante y reduce su presión, preparándolo para el evaporador.

Las bombas de calor funcionan con electricidad; por cada kWh de calor que proporcionan, se estima que el 25 % proviene de la electricidad y el 75 % restante proviene del aire, lo que las hace extremadamente eficientes.

Tienen un índice de eficiencia de aproximadamente el 300 %. Esto significa que por cada 1kWh de electricidad utilizada, generará de 3 a 4 veces más calor.

La instalación de una bomba de calor ofrece varios beneficios, lo que hace que sea una opción atractiva para calentar y enfriar en diversos entornos. Aquí hay algunas razones de peso para instalar una bomba de calor:

Cuando estudie la posibilidad de instalar una bomba de calor, es esencial evaluar sus necesidades específicas, el clima, el presupuesto y los incentivos disponibles. Consultar a un profesional de HVAC autorizado puede ayudarlo a determinar el mejor sistema de bomba de calor para sus circunstancias y garantizar una instalación adecuada y un funcionamiento eficiente.

Eficiencia energética: Las bombas de calor son muy eficientes energéticamente, ya que transfieren calor en lugar de generarlo a partir de una fuente de combustible. Pueden proporcionar una reducción significativa del consumo de energía y facturas de servicios más bajas en comparación con los sistemas tradicionales de calefacción y refrigeración.

Confort durante todo el año: Las bombas de calor pueden calentar y enfriar un espacio, proporcionando confort durante todo el año en un solo sistema. Regulan eficientemente la temperatura interior durante todas las estaciones, lo que las hace versátiles y rentables.

Respetuoso con el medio ambiente: Las bombas de calor utilizan electricidad para transferir calor, lo que las convierte en una opción más respetuosa con el medio ambiente, especialmente si la electricidad proviene de fuentes renovables o de bajas emisiones. No producen emisiones directas in situ.

Ahorro de costes: Si bien el coste inicial de instalar una bomba de calor puede ser más alto que el de otros sistemas de calefacción o refrigeración, los ahorros de energía a largo plazo a menudo compensan esta inversión inicial, por lo que a largo plazo se verá reflejada en las facturas.

Bajo mantenimiento: Las bombas de calor suelen requerir menos mantenimiento en comparación con los sistemas tradicionales de calefacción y refrigeración, como calderas y aires acondicionados. Suele ser suficiente una limpieza periódica y revisiones ocasionales para que sigan funcionando de manera eficiente.

Longevidad: Las bombas de calor son conocidas por su durabilidad y longevidad. Con un mantenimiento y cuidado adecuados, una bomba de calor puede durar muchos años y proporcionar calefacción y refrigeración estables durante toda su vida útil.

Calefacción y refrigeración uniforme: Las bombas de calor distribuyen el calor o el aire frío de manera uniforme por todo el espacio, lo que da como resultado temperaturas uniformes y agradables en todas las habitaciones.

Funcionamiento silencioso: Los sistemas de bomba de calor modernos están diseñados para proporcionar un funcionamiento silencioso, minimizando las molestias causadas por el ruido en el espacio donde vive o donde trabaja.

Capacidad de zonificación: Las bombas de calor pueden dotarse con sistemas de zonificación, lo que le permitirá controlar la temperatura en diferentes zonas o estancias de su hogar de forma independiente. Esto puede generar ahorros de energía adicionales.

Incentivos y descuentos: Dependiendo de su ubicación, es posible que pueda optar a varios incentivos, reembolsos o créditos fiscales por instalar una bomba de calor, lo que reduce aún más la inversión inicial y mejora la rentabilidad general.

Sí, las bombas de calor son adecuadas para usarse con radiadores nuevos y existentes. En muchos casos, los radiadores existentes son lo suficientemente grandes como para permitir una temperatura de flujo más baja, especialmente si se están realizando mejoras en la eficiencia energética del edificio.

Las calderas de gas y las bombas de calor se utilizan para calentar edificios, pero funcionan basándose en principios diferentes y tienen características distintas.

Si bien el resultado final (calefacción central y de agua) es el mismo, el diseño, la configuración, las operaciones y la sostenibilidad de cada producto son muy diferentes.

Las calderas producen grandes cantidades de calor muy rápidamente. Las bombas de calor producen calor a un ritmo constante a partir de una temperatura más baja y también son una alternativa más respetuosa con el medio ambiente ya que utilizan energía renovable. De hecho, las calderas de gas producen emisiones, incluyendo dióxido de carbono (CO2) y óxidos de nitrógeno (NOx), cuando queman gas natural o propano. Contribuyen a las emisiones de gases de efecto invernadero y a la contaminación del aire. Por otro lado, las bombas de calor generan menos emisiones directas debido al uso de energía natural.

En muchos hogares, el ahorro de energía es una preocupación. Aquí encontrará varias maneras de mantener un alto nivel de confort y al mismo tiempo ahorrar energía y reducir sus facturas:

Optimice los sistemas de calefacción y refrigeración:
Mantenga y realice el mantenimiento de sus sistemas de calefacción y refrigeración periódicamente para garantizar que funcionen de manera eficiente. Limpie o reemplace los filtros de aire según lo recomendado y programe un mantenimiento por parte de un profesional.

Utilice herramientas y sistemas de programación inteligentes:
La app hOn: La aplicación hOn le permite controlar y gestionar todos los electrodomésticos inteligentes de Haier en su hogar. Todas las funciones básicas se pueden gestionar desde su smartphone, como las funciones de purificación y planificación. También es compatible con Google Assistant y Alexa. Al permitirle controlar eficientemente su aire acondicionado y encenderlo justo cuando lo necesita, la aplicación hOn le ayudará a ahorrar energía sin siquiera pensar en ello.
Sensor ECO: El aire acondicionado, gracias al sensor ECO, detectará la intensidad de la luz, el movimiento de personas en la habitación y el nivel de actividad. A continuación, ajustará automáticamente la refrigeración o calefacción, lo que permitirá reducir el consumo de energía.

Programe su aire acondicionado y su bomba de calor: establecer algunas horas de trabajo para ajustar automáticamente la temperatura de su hogar cuando no esté allí o durante las horas de sueño puede reducir significativamente los costes de calefacción y refrigeración.